El uniforme voluntario

Ante la situación actual que enfrentamos, hemos descubierto la gran accesibilidad de trabajar desde cualquier lugar, sin necesidad de trasladarnos a una oficina, podemos sostener eventos o reuniones importantes desde casa. Quizá tú, como yo te has sentido tentado a “relajar” tu vestimenta, pero recuerda que nuestra ropa tiene efectos sobre nuestros niveles de desempeño, confianza en uno mismo y hasta nuestras habilidades para negociar. Así que tenemos que pensar dos veces antes de decidir quedarnos en pijama o pants deportivos todo el día.

Hoy quiero compartirte una opción cada vez más utilizada y viable para vestirnos adecuadamente al puro estilo de Mark Zuckerberg, Barack Obama, y Steve Jobs. Sí, como ellos decidir elegir tu “uniforme” y no romperte la cabeza pensando ¿y ahora qué me voy a poner? Te comparto algunas recomendaciones para simplificar tu rutina de las mañanas.

Básicos, clásicos y atemporales. El primer punto para simplificar y optimizar nuestra indumentaria es elegir las prendas clave, cada pieza, debe combinar con al menos, otras tres. Cuida que las prendas que seleccionaste reflejen tus objetivos y estilo personal.

Colores Clave.  Debes elegir tonalidades neutras y firmes (sin estampados, ni texturas visibles). Algunos de los colores que debes incluir son los clásicos: negro, blanco, azul marino, gris y rojo. Ten encuentra al elegir tu paleta de colores algunas tonalidades que resalten tus características físicas y te hagan lucir más saludable.

Piezas de acento. Los accesorios y complementos debe ser menos restrictivos, serán  los puntos de enfoque y énfasis para cada un de los looks que armes.

Espero que puedas poner en práctica estas recomendaciones y que con tu vestuario diario puedas crear un uniforme identificativo que se convierta en una seña de tu personalidad reconocible para todos.

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