Los seguros no pagan

Me encantaría comenzar diciendo que cuando compras un auto lo más importante es el color, modelo y la comodidad de transportarte y que para todos los demás pudiera ser que también; pero olvidamos que lo verdaderamente importante es el uso que le daremos ¿Por qué sería importante el uso que le daré a mi auto si finalmente lo compré para trasportarme y es mío? Simple y sencillamente porque ir al volante implica una responsabilidad para el conductor y/o dueño del auto; el buen uso del vehículo y su buen mantenimiento, nos ayudan a trasladarnos de manera segura y eficiente, somos totalmente libres de decidir el horario para utilizarlo, también para incluir a las personas con las que deseamos compartir nuestro viaje; depende de nosotros si deseamos tomar caminos largos, atajos, y carreteras o bien dejarlo estacionado por un buen tiempo; seguramente tu si le das ese buen uso y su buen mantenimiento; pero déjame contarte que no todos lo hemos hecho (en ocasiones) Pero no siempre respetamos las señales de tránsito, menos los semáforos; por supuesto alguno que otro de nosotros ha evadido los alcoholímetros; hemos viajado cansados, hemos visto nuestro celular para responder esa llamada o mensaje, llevamos a nuestro perro al paseo, le “enseñamos a manejar al bebé de 3 años, ¿Por qué no?

 bebé de 3 años, ¿Por qué no? En fin; precisamente este mal uso es el principal motivo por el que tu auto deja de verse bonito. Recuerdo en este instante esa frase que tanto he escuchado y que ahora encaja perfecto: “cada decisión que tomamos implica una consecuencia obviamente buena o mala” Ojalá que la mayoría de tus decisiones hayan generado buenas consecuencias, seguro sí; pero dar mal uso al vehículo te cuento que para nada han sido buenas.

Aparte déjame compartir que de todos los vehículos que existen a nivel nacional solo un 30% cuenta con una protección para ti, tu coche, tus ocupantes o alguna pérdida material o hacia alguien o algo más. ¿Entonces qué pasa si tú le das buen uso y los demás no? ¿Qué ocurre si te distraes, aunque no siempre lo haces, pero solo fue un momento? ¿Qué consecuencias pueden generarse cuando otro vehículo se queda sin frenos? Creo que a nadie y menos en estos tiempos nos gusta vivir en la incertidumbre ni dependiendo de la suerte del día; ni exponer a nuestros familiares ni lo que tanto nos costó ahorrar para comprar nuestro auto, ni perder el tiempo tan valioso que invertimos para escoger el color y revisar su buen funcionamiento; por ello sí es más importante no estar solo en esos momentos en los que pueda suceder algo que nos haga perderlo o a alguien que tanto queremos y cuidamos.

Las aseguradoras manejan todo tipo de coberturas, tú puedes elegirlas y conocer en qué casos utilizarlas y qué alcances puede tener. El que te diga que la cobertura amplia te cubre todo, de entrada, no te está asesorando bien, por eso es importante tener mayor conocimiento de lo que compramos antes de tomar una decisión. Revisar tus sumas aseguradas, así como la diferencia que hace que un costo sea menor o mayor genera una gran diferencia en el momento que se vuelve tangible la compra que hiciste. Por cierto; las letras chiquitas ya no vienen en las exclusiones; ya todas son del mismo tamaño, recuerda que quizá has tenido derecho a algún beneficio que por falta de asesoría o conocimiento no has solicitado.

Lo que si te puedo decir es que no debieran negarte pago alguno mientras tu tengas contratada la cobertura adecuada siempre y cuando cumplas con los principios básicos que cada compañía establece en tu contrato. Ahora puedes descargar tus condiciones fácilmente a través de internet o aplicaciones que facilitan tener el control de tu información a la mano y cuando más la llegues a necesitar. Tampoco debe de depender del humor de algún colaborador. Tu tienes la misma libertad de ejercer la aclaración de la procedencia de tu siniestro, así como la tuviste cuando compraste tu vehículo.

Rosy Meneses
Directora Regional de Quálitas México y CEO de Qualitas El Paso para Qualitas Insurance Company